Me duele hablar contigo, aunque quiero hacerlo, me duele.
Me duele cuando me dices "mi amor", cuando me dices "te quiero", me duele. Porque aunque me tengas cariño, aunque me tengas aprecio, sé que no me quieres (you don't want me) sino las cosas serían distintas.
Me duele ser tan patético, me duele ser tan iluso, me duele ser tan mariquito para estas cosas, me duele.
Me duele no saber reaccionar en estas situaciones, me duele contestarte mal, me duele tratarte con indiferencia, me duele tratar de ignorarte, me duele que me ignores, me duele que no podamos ser más que amigos, me duele que no sé si aún somos amigos.
Me duele que seas la única persona que me acepta tal cual como soy pero que por causas que desconozco, no quiera/pueda estar conmigo.
Me duele ponerme "emo", me duele refugiarme detrás de esta pantalla, me duele pensar que lo leerás y que sabrás que hablo contigo, me duele creer que pensarás que soy inmaduro, aunque esa sea la verdad.
Me duele "el corazón", me duele en "el alma", me duele en aquellos lugares del cuerpo que no salen en los libros de anatomía.
Increíblemente disfrazo ese dolor con sonrisas, con bromas, con chistes, lamentablemente al final del día, cuando estoy realmente sólo, eso no cuenta, eso, también me duele.
Y aún te quiero, sabes que te quiero, y que me encantaría estar contigo, pero hay algo que me impide verte, algo que me impide hablarte, algo que me impide concentrarme en no pensar que nunca podré tenerte, algo, algo que me duele.